jueves, febrero 02, 2012

La guerra del Siglo XXI

Funcionarios del FBI el jueves 19 de enero de 2012 cerraron “megaupload.com” una de las páginas de intercambio de archivos más grandes de la red. Los agentes afirmaron que éste era uno de los de los casos criminales sobre “derechos de autor” más grandes que han sido entablados por los Estados Unidos.

Los agentes del FBI detuvieron a cuatro personas acusadas de delitos de piratería en internet, incluyendo a Kim Schmitz, uno de los fundadores de Megaupload, en tanto otras tres personas mencionadas en la acusación continúan libres. Son acusados de producir pérdidas de más de 500.000 millones de dólares a “propietarios” de derechos de autor (mega corporaciones del espectáculo global).

Una corte federal en Virginia ordenó que 18 dominios asociados con la compañía, basada en Hong Kong, sean confiscados. El Departamento de Justicia dijo que se emitieron más de 20 órdenes de registro de allanamiento en nueve países y que se habían confiscado aproximadamente 50 millones de dólares en activos.

La entidad, utilizando un lenguaje similar al de la década del 20 del siglo pasado, (durante de la vigencia de la “ley seca” en Estados Unidos), explicó que la empresa clausurada, promocionaba el uso de vínculos a páginas de terceros para publicitar su contenido, de esta forma:
 
"…los conspiradores (sic) no tuvieron necesidad de publicitar el contenido en la página de Megaupload".

Con ello está anunciado que muchas páginas de terceros también podrían sufrir un impacto. Megaupload es muy popular en Latinoamérica. Según el medidor Alexa, mientras que en Estados Unidos estaba posicionada en el ranking 256, en México y Argentina estaba en la posición 18. De los 12 países en los cuales Megaupload estaba entre las 30 páginas más visitadas, ocho eran países hispanohablantes.

Al enterarse Rick Falkvinge, fundador de la web Pirate Bay y líder del partido pirata sueco se mostró indignado y declaró (por correo electrónico) a la prensa:
"Estoy indignado por la arrogancia mostrada por las autoridades de los Estados Unidos en el caso. Si emprendedores no estadounidenses a cargo de negocios no estadounidenses pueden ser arrestados a petición de las autoridades de ese país, por romper las leyes de los Estados Unidos y si las leyes de ese país se reservan el derecho de supervisar la competitividad y el emprendimiento en cada territorio, entonces yo demando el poder de votar en los Estados Unidos.

También han reaccionado un grupo de hackers denominado “Anonymous”, lanzando una serie de ataques en contra de sitios web de la Casa Blanca, el FBI, el Departamento de Justicia de los Estados Unidos y varias compañías de música y cine.
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Si bien pudo comprobarse que sitios del Departamento de Justicia de los Estados Unidos y de la corporación Universal Music Group han estado fuera de servicio, dichas entidades no han dado ninguna declaración oficial.

Megaupload tenía más de 150 millones de usuarios y desde el punto de vista jurídico algunos expertos han opinado que el FBI tuvo una conducta abusiva al volver inaccesible miles de archivos legalmente almacenados, con lo que queda claro que han “protegido” el derecho de propiedad intelectual de las grandes corporaciones y han violado igual derecho intelectual de miles internautas que habían compartido de manera legítima y legal sus archivos a través de Megaupload. Con ello el principio de igualdad ante la ley fue vulnerado.

El concepto de “propiedad intelectual” debe ser revisado así como también la rentabilidad asociada al mismo, atento a que en su pretendida defensa se están vulnerando otros derechos de igual o mayor raigambre que aquel.

Hasta dónde una mega corporación que ha heredado y utilizado libremente un bagaje cultural gratuito de casi tres milenios, tienen derecho a cobrar por su reutilización. No es que la recreación y el trabajo que implica no valgan nada, pero hasta dónde, es la cuestión. ¿Cuál es el límite del poder de policía de un organismo de un estado para “juzgar” y actuar en consecuencia en todo el mundo?

Se está viviendo una época similar a la vivida a principios del siglo XX. Antes del advenimiento de las emisoras radiales la gente debía pagar por informarse y comprar un diario en papel. ¿Alguien pudo imaginar que las emisoras de radio pretendan cobrar por sus emisiones? Suena ridículo. ¿La radio acaso mató a los diarios? Muy por el contrario incentivaron la lectura de los mismos.

El internet ha llevado a otro nivel a la información y a la divulgación de la cultura, la ciencia y el conocimiento. Ha colocado a sus contenidos en un medio tan intangible y maleable como se creía que era el “éter” por el que se desplazaban las ondas radiales, pero con una diferencia: el nivel de acceso y participación en la creación o construcción de contenidos es global interactivo y exponencial.

Internet también ha favorecido el contacto directo entre creadores y destinatarios “perjudicando” a los intermediarios que lucraban con la intermediación a límites inimaginables, de lo contrario no existirían mega-corporaciones piramidales que producen películas globales accediendo a todo el planeta, pero cuyo lucro responde a un esquema de concentración nunca antes dado en la historia de la humanidad. Cabe destacar que no es necesariamente lo mismo, ser “propietario de derechos de autor” que ser “el autor” del contenido. Normalmente los autores son convidados de piedra en el banquete de las megas ganancias corporativas.

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Por otro lado no deja de ser una ironía que la imagen del conejo Bugs Bunny, ofrezca dificultades para su divulgación, cuando por otro lado uno puede acceder a “La República” de Platón sin ningún inconveniente. Sin embargo el problema es que por proteger a la mega corporación Warner y a su conejito estrella se termine obstruyendo el acceso a Platón. Muchos de los contenidos cuyo acceso hoy está impedido nada tienen de ilegal y ni siquiera de comercial.

En este contexto se inscribe el intento de sancionar dos leyes (SOPAStop Online Piracy Act o Acta de cese a la piratería en la web) y PIPA PROTECT IP Act o Preventing Real Online Threats to Economic Creativity and Theft of Intellectual Property Act o prevención real de amenazas en la web de la creatividad económica y del robo de propiedad intelectual), que provocaron la reacción de Wikipedia, Google, Twitpic, Wordpress, Reddit y otros portales que interrumpieron sus servicios por un día. La presión de los internautas hizo que estos proyectos quedaran “congelados”, hasta que se logre “consenso”.
 
Por último puede hacerse otra lectura de estos acontecimientos, insinuada en el artículo publicado en “Diario El Peso” en octubre de 2011 titulado “El Gran Dictador” y que encierra la posibilidad de controlar la red, hoy el ámbito más libertario de la historia de la humanidad. Sin embargo la misma tecnología que propicia la inter-conectividad global y el tráfico exponencial de información es la que puede identificar y controlar a cada ciudadano del mundo, ya sea “protegiendo a propietarios de derechos de autor” o buscando “potenciales delincuentes o terroristas”. La tecnología en tanto que tal es neutra al valor por lo que, ceder por ley el control de la red a un organismo de policía (público o privado) es privatizar la libertad, que pasará a tener precio, en el mejor de los casos o lisa y llanamente a desaparecer. Resulta propicio recordar la frase propuesta por Wikipedia en su apagón: “Imagina un mundo sin conocimiento libre”.