jueves, marzo 24, 2005

Reforma constitucional en Italia...

Italia: luz verde a la reforma que da más poderes a Berlusconi e impulsa un mayor federalismo

El premier podrá disolver el Parlamento, nombrar ministros y también relevarlos El proyecto prevé además que cada una de las 20 regiones pueda legislar sobre educación y salud

ROMA.- En medio de grandes protestas de la oposición de centroizquierda, el Senado italiano aprobó ayer una controvertida reforma de la Constitución, que otorga más poder al primer ministro, implica mayor federalismo -es decir, más autonomía para las 20 regiones del país- y modifica la composición del Parlamento.

El texto, aprobado en octubre último por la Cámara baja, contó con 162 votos a favor y 14 en contra, en una sesión en la que hubo gritos, silbidos y se enarbolaron banderas tricolor del lado de la oposición, que se retiró del recinto en señal de protesta. Y en la que también hubo apretones de manos y grandes sonrisas del lado del oficialismo de centroderecha.

Fue la ex secesionista Liga Norte, de Umberto Bossi, la que más festejó, porque esta agrupación díscola siempre chantajeó a Berlusconi con quitarle apoyo si no avanzaba su proyecto de devolución de poderes a las regiones, su caballito de batalla.

Para ser definitiva, la reforma deberá pasar nuevamente por las dos cámaras, en sesiones en las que ya no se podrá debatir ningún artículo, ni presentar enmiendas. Por eso se descuenta que el texto no sufrirá alteraciones y será aprobado sin sobresaltos.

Cuando esto ocurra, la oposición de centroizquierda, llamada ahora "La Unión" -liderada por el ex premier Romano Prodi-, pedirá un referéndum confirmativo previsto por la ley en estos casos, para impedir la iniciativa, algo que, según declaró ayer Berlusconi, deberá tener lugar el año próximo, después de las elecciones legislativas.

Derechos

Considerada una verdadera "catástrofe" por la oposición, la reforma constitucional aumenta el poder del primer ministro. Este, en efecto, tendrá derecho a disolver el Parlamento, a nombrar ministros (hasta ahora sólo los proponía) y a removerlos de sus cargos, competencias que hasta ahora tiene el presidente de la república. Para asumir sus funciones, por otra parte, ya no tendrá necesidad de un voto de confianza del Parlamento.

Además, el candidato a primer ministro será claramente identificado en las boletas electorales, por lo que el presidente ya no podrá proponer a otro, sino que estará obligado a respaldar al aspirante más votado. El jefe de Estado, asimismo, podrá disolver el Parlamento pero sólo tras el pedido del primer ministro, o en caso de muerte o renuncia, o voto de confianza.

Se introducen, por otra parte, normas que dificultan los cambios de alianzas -que aquí siempre dieron lugar a una mayor inestabilidad, porque con frecuencia determinan la caída de gobiernos-, y las mociones de censura.

La reforma supone un avance del federalismo, ya que prevé que las 20 regiones italianas puedan legislar sobre salud, educación y policía administrativa regional y local. Fue prevista, sin embargo, una cláusula de interés nacional que prevé que el gobierno pueda bloquear una ley regional si considera que ésta perjudica el interés nacional.

La nueva Carta Magna también implica el nacimiento del Senado Federal de 252 miembros (en lugar de los 315 actuales), y una reducción del número de diputados (de 630 a 518).

Mientras la centroderecha festejó a lo grande esta nueva luz verde de una reforma "que mejora nuestro orden institucional", como dijo Berlusconi desde Bruselas, la oposición de centroizquierda puso el grito en el cielo y habló de "subversión constitucional".

"Con esta reforma los equilibrios anteriores, que eran el sostén de nuestra democracia, quedan inevitablemente comprometidos -dijo el ex premier y actual líder de La Unión, Romano Prodi-. El rol del presidente de la república, del Parlamento, de la Corte Constitucional y de la magistratura son pisoteados."

"Esta no es una reforma de la Constitución, es la destrucción de la Constitución hecha para hacerle un regalo a Bossi y a la Liga, porque están en campaña electoral", acusó Alfonso Pecoraro Scanio, de los Verdes.

El senado aprobó la reforma constitucional a diez días de las elecciones regionales del 3 y 4 de abril próximo, y el mismo día que trascendió que la Fiscalía de Milán abrió nuevas investigaciones contra Berlusconi, acusado una vez más de corrupción.

La hipótesis es que el "cavaliere", el hombre más rico de Italia, compró o hizo comprar en las décadas del 80 y el 90 una declaración ante tribunales italianos de un testigo británico, David Mills, abogado de la empresa off shore de la tesorería oculta de su imperio mediático, en un caso jurídico por negocios de derechos cinematográficos.

La investigación sobre Mills por falso testimonio es parte de un sumario abierto el 19 de febrero último contra Berlusconi por fraude fiscal, sospecha de engaño y falsificación de balances.
Por Elisabetta Piqué Corresponsal en Italia

http://www.lanacion.com.ar/exterior/nota.asp?nota_id=690023
LA NACION 24.03.2005 Página 3 Exterior