viernes, marzo 30, 2012

La Cruz Roja y el irrespeto a su emblema

BBC Mundo, 30 de marzo de 2012.

La organización no acepta este tipo de comportamientos 
 por ser contrarios a los fundamentos 
del Movimiento Internacional de la Cruz Roja". Julio César 
Torres, portavoz de la delegación regional del CICR para CA
La aparición del logotipo de la Cruz Roja en circunstancias que no se corresponden con sus principios volvió a generar cierto revuelo mediático, en esta ocasión en el marco de la visita del papa Benedicto XVI a Cuba.

La estancia del Papa en Cuba dejó numerosas imágenes para el recuerdo. Una de ellas fue especialmente controvertida. En una grabación de video se pudo apreciar cómo las fuerzas de Seguridad del Estado retiraban bruscamente a un hombre que, en la Plaza Antonio Maceo en Santiago de Cuba, vociferaba frases contra el comunismo.

El video, que inmediatamente circuló por internet, desató reacciones de estupor e indignación. A la gente no le llamaba tanto la atención el hecho de que miembros de las fuerzas de seguridad reprimieran a alguien que se expresaba contra el régimen.

Lo que resultaba más sorprendente era ver a un hombre con un peto de la Cruz Roja y una camilla que se acercaba al detenido y lo agredía físicamente.

"Una conducta inaceptable"

La reacción de la Cruz Roja no se hizo esperar. Desde la delegación regional para México, América Central y Cuba del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), con sede en la capital mexicana, comunicaron que se ha abierto una investigación para aclarar las circunstancias en que se dio el suceso.

El responsable de Comunicación Pública de la organización en dicha oficina, Julio César Torres, le dijo a BBC Mundo que el posicionamiento del Comité Internacional de la Cruz Roja y la Federación de Sociedades de la Media Luna Roja es claro: "Repudiamos y lamentamos la conducta que mostró esta persona por cuanto no coincide con los principios de humanidad, independencia e imparcialidad de la organización".

De momento es todo lo que la organización manifiesta, a la espera de conocer más detalles sobre los acontecimientos.

Torres confirmó que la investigación está en marcha y señaló que, una vez se conozcan los resultados, se adoptarán las medidas pertinentes. No se sabe quién es la persona que atacó al detenido ni el alcance de su relación con la organización humanitaria.

"La conducta no es aceptable", subraya Julio César Torres, y añade que la organización "no acepta este tipo de comportamientos por ser contrarios a los fundamentos del Movimiento Internacional de la Cruz Roja".

Otros usos inapropiados

Muchos recuerdan estos días lo que sucedió hace casi cuatro años, en el marco del rescate de la excandidata presidencial colombiana, Ingrid Betancourt y otros 14 rehenes, secuestrados por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, las FARC.

En la llamada Operación Jaque, que en un principio fue reconocida como acción ejemplar ya que no se disparó un solo tiro, se emplearon símbolos de la Cruz Roja para despistar a los miembros de la guerrilla.

Era julio de 2008 y, pasados los primeros días de euforia, comenzaron a aflorar las críticas. El objetivo se había cumplido, pero ¿a qué precio?

El CICR emitió en ese momento un comunicado en el que lamentaba el mal uso del emblema de la organización para la operación del ejército colombiano, y lo tildó de violación del Derecho Internacional Humanitario y de los Convenios de Ginebra.

El uso de emblemas de la Cruz Roja o el abuso de otros signos o señales que sean reconocidos internacionalmente como símbolos de protección es, según el Protocolo I de 1977 de los Convenios, un "acto de perfidia".

El caso de Colombia requirió de un montaje más elaborado, con página de internet y toda una estrategia del engaño para lograr un fin específico. En el caso de los sucesos de Santiago de Cuba, se trata de un individuo que, en principio, actuaba solo.

Aun así, la organización está preocupada por el impacto que este tipo de sucesos puede tener sobre la imagen de la organización.

El hecho de que tanto el gobierno colombiano como las FARC sigan contando con la Cruz Roja Internacional como mediador válido en la liberación de rehenes puede ser indicativo de que el prestigio de la organización no se ve afectado por el mal uso que otros hagan de su imagen.